En esta formación de texto, video y audio, aprenderás todo lo que tienes que saber sobre finanzas personales e inversión para que el dinero no sea nunca más un problema. Desde cero. Para ti.
Cuando lo acabes (te llevará unas 10-15 horas), habrás puesto tus finanzas personales en orden y estarás invirtiendo para crear una vida con más libertad.
Acceder ahora«Los ejercicios me gustaron mucho, muy prácticos y explicados paso a paso. El orden hace que sientas que vas empezando a controlar tus finanzas y, aunque partía de cero, al final del Manual ya estaba invirtiendo mi dinero. Lo recomiendo.» — Julio R., alumno del Manual
Se puede aprender a ser bueno con las finanzas?
¿Con el talento se nace o se hace? ¿Podemos mejorar nuestra inteligencia?
¿Cuáles son las consecuencias de pensar que tu inteligencia o personalidad es algo que puedes desarrollar, a diferencia de algo que es fijo y no se puede cambiar?
¡Vamos a verlo!
Los dos tipos de mentalidad
Carol Dweck es una doctora en psicología que estudia por qué las personas tienen éxito (o no) y qué está bajo nuestro control para fomentar el éxito.
Desarrolló la teoría de los dos tipos de mentalidad: fixed mindset (mentalidad fija) y growing mindset (mentalidad de crecimiento).
La persona con una mentalidad fija cree que la inteligencia y el talento es algo estático y no se puede mejorar. Nació así y nada va a cambiar.
Evita los retos y se da por vencida cuando llegan obstáculos difíciles, ya que no ve sentido dedicarle esfuerzo si no los ha podido superar la primera vez.
Las críticas pasan a ser ataques personales, ya que la persona es como es y será así toda su vida.
Esta visión determinista lleva a que estas personas no consigan todos los éxitos que podrían en la vida y sean conformistas.
Por el contrario, una persona con mentalidad de crecimiento cree que el talento y la inteligencia se pueden adquirir con entrenamiento y aprendizaje.
Esto le hace afrontar retos, ya que si persiste y se esfuerza lo suficiente acabará superándolos, mejorando sus habilidades en el camino.
Las críticas son bienvenidas ya que es una fantástica oportunidad para mejorar tus puntos débiles.
Estas personas acaban consiguiendo grandes éxitos, algunos que quizás jamás se imaginaban que podían alcanzar.
Vete a la cama más inteligente de cuando te levantaste
La mentalidad de crecimiento no sólo es fantástica para conseguir el éxito en diferentes aspectos de la vida (unas buenas finanzas personales, un trabajo con el que estés satisfecho, un cuerpo saludable y fuerte…), también ayuda en la parte emocional, porque nos da esperanza.
Si toda tu vida has manejado mal el dinero, sin ahorrar ni un céntimo y tienes una mentalidad fija probablemente te resignes:
- «Es que soy así. Soy malo con el dinero, lo gasto sin darme cuenta».
- «Es lo que vi en casa desde pequeño, ya no lo puedo cambiar».
- «La inversión me parece complicadísima, jamás me enteraré de esas cosas de la bolsa».
Una clara profecía autocumplida: si de verdad crees que nunca vas a aprender a manejar el dinero en condiciones y a invertir… nunca lo vas a hacer, es cierto.
En cambio, una mentalidad de crecimiento abre la puerta al cambio, a mejorar tu relación con el dinero. A ponerte a leer sobre cómo ahorrar y empezar a poner en orden tus finanzas personales.
No será fácil. Quitarte tus malos hábitos en el ámbito financiero o el que estés tratando de mejorar es una tarea difícil. Pero de eso va la vida.
Tampoco se trata de hacer cambios radicales de la noche a la mañana. Como dijo Charlie Munger: «Ve a la cama más inteligente que cuando te levantaste».
Simplemente mejorar un poco más pero de forma consistente cada día tiene resultados espectaculares a largo plazo.
Aprendizaje constante
Charlie Munger y Warren Buffett tienen 98 y 92 años, respectivamente. En sus entrevistas siempre hacen hincapié en la gran cantidad de horas que dedican a la lectura y a reflexionar diariamente sobre los temas que leen. Sólo se basan en datos, no en opiniones.
A pesar de ser dos de los mayores grandes inversores de todos los tiempos, están en aprendizaje continuo, cada día mejoran respecto al anterior. Claros ejemplos de mentalidad de crecimiento.
Tener mentalidad de crecimiento o mentalidad fija (y nunca habías leído ni reflexionado sobre ello), no lo has decidido tú. Es algo que desde pequeño has interiorizado según lo que hayas visto en tu familia, escuela y amigos.
La buena noticia es que cambiar a una mentalidad de crecimiento no es sólo posible, sino también recomendable.
Si no conocías estas dos mentalidades que tanto impacto tienen en nuestra vida, espero que este recurso te haya abierto los ojos y te anime a adoptar una mentalidad de crecimiento.
Cada domingo envío un email con ideas y recursos potentes para que aprendas a manejar tus finanzas e invertir.